LAS POLÍTICAS NEOLIBERALES HACEN QUE LA DEUDA NOS ASFIXIE CADA DÍA MAS, QUE LLEVE A MILLONES DE CIUDADANOS A LA POBREZA Y CONVIERTA A LOS TRABAJADORES EN PARIAS CON CONTRATOS BASURA Y SALARIOS DE MISERIA.
CAMBIAR EL MODELO DE ESTADO O LA RUINA, ESA ES LA CUESTIÓN
No solo la disparatada deuda pública, ni el
irresponsable y temerario déficit de las Comunidades Autónomas que gastan el
doble de lo que ingresan, ni son los 5.900.000 parados y el 57% de los jóvenes desempleados, ni la
desbordada corrupción, ni las leyes retrogradas contra los derechos de las
mujeres con la ley del aborto o las leyes contra las libertades con la ley de
seguridad ciudadana lo que marca a un país con un drama que afecta igual a hombre
que a mujeres, a mayores que a niños y que está llevando a España a convertirse
en un país tercermundista.
Son las políticas neoliberales tanto de Zapatero
como de Rajoy de un modelo de Estado basado en la protección de las oligarquías
económicas y la concesión de privilegios a las élites de poder de este país, en
detrimento de las clases más humildes y pobres las que han llevado a la ruina a España, que ya
soporta la 2ª mayor deuda del entorno europeo
La deuda esta disparada alcanzando la dramática cifra de 955.000 millones, un 94.88% del PIB. De ella 700.262 millones corresponden a la Administración
Central, 225.000 a las CCAA y 61.967 a las Corporaciones locales.
El Estado ingresa aproximadamente 100.000
millones de euros, pero gasta 170.000 millones, lo que año tras año sufrimos un
desgaste y un déficit de 70.000 millones.
Hoy en las arcas del Estado hay un déficit
de 170.000 millones y en este déficit no están incluidos los 40.000 millones de
euros concedidos a las Cajas.
Si el estado sigue con sus políticas, si no
cambia radicalmente el modelo de Estado sobre todo su política fiscal, si sigue
generando más gastos que ingresos, llegará un momento (y hay que estar
prevenidos) en que el estado sufra una quiebra.
Y a pesar de los discursos triunfalistas de
Rajoy de que la economía empieza a despegar, lo cierto es que no se traduce en
mejora alguna en el balance de cuentas del estado. La economía mejora si, pero para
la élite económica del país, la banca, la empresa, los oligopolios, el capital,
pero el estado no encuentra la fórmula adecuada para revertir esos beneficios
de dicho capital a engordar las arcas del estado y solo se le ocurre lo peor que
puede hacer un Gobierno, subir los impuestos a los trabajadores y las PYMES, bajar los salarios y privatizar
los servicios públicos, haciendo que baje el consumo drásticamente y en
consecuencia la creación de empleo y no quiere admitir que es aquí, en la
creación de empleo donde España se la juega.
Los daños colaterales generados por esas
desastrosas políticas de los últimos
gobiernos, pero sobre todo el de Mariano Rajoy, hacen que el daño se perciba en
todos los ámbitos de la sociedad, desde trabajadores a pensionistas, desde autónomos
a pequeñas y medianas empresas, pero sobre todo en esa población que cada día
es mas pobre y cuyo poder adquisitivo no es suficiente para cubrir las
necesidades básicas y de primera necesidad como son el alimento, el vestido, la
cultura y la vivienda.
Al día de hoy 12 millones de personas han
entrado en el umbral de la pobreza, de los cuales más de 3 millones son marginados y excluidos de los beneficios
de vivir integrados en una sociedad solidaria, equitativa y justa. Más de 2
millones de niños que pasan penurias, necesidades y hambre y 3 millones de personas
han sido atendidas por los servicios sociales en comedores solidarios.
Cerca de 450.000 familias han sido
desahuciadas y sigue el ritmo de desahucios, mientras persiste la connivencia
con aquellos defraudadores de alto standig y de los cientos de miles de
privilegiados nombrados a dedo en las administraciones con salarios de escándalo,
con la de aquellos banqueros que se llevan bonos y pensiones millonarias de
cajas que ya estaban en quiebra en el momento de los desfalcos.
Que no venga ahora Rajoy en el próximo
debate de la Nación que se celebrará el próximo miércoles a contarnos que la
economía de España está saneada y que el país empieza a despegar `porque será
una bofetada a la inteligencia de los ciudadanos y una burla a todos aquellos
que sufren el drama del paro, la supervivencia con salarios de miseria y la falta de esperanza de cientos de miles de
jóvenes que no ven esperanza alguna para su futuro.